¡Feliz mes de junio! Os saludo un día más participando en este maravilloso proyecto. Antes de empezar, espero que os encontréis bien y que tengáis ganas de abordar este verano que, aunque haya que seguir teniendo precaución y cuidado, parece que va a ser algo más diferente al anterior.
Este mes os traigo… ¡Reseña! Sí, exacto, una reseña que yo creo que viene perfecta tras haber superado este mes de mayo, y es que hace un poco más de tres semanas terminé de leer por fin El nombre del viento, y como me ha resultado una lectura tan bonita, qué menos que pasarme por aquí para recomendárosla. Sinceramente, en mi caso he de admitir que ha sido un proceso lento, no porque el libro resultase pesado o difícil de leer, sino por las miles de cosas que he tenido que hacer durante estos meses, por lo que solo me reservaba las noches para leer, y no solía avanzar más de uno o dos capítulos. Aún así, agradezco haber tardado porque he podido saborear y disfrutar cada frase y cada página. Este libro me lo recomendó mi pareja, ya que es su favorito, y llevaba tiempo queriendo leerlo así que cuando terminé el último libro de Cazadores de Sombras (que después de tanto tiempo, aún no había leído), me adentré en él. Y qué experiencia tan bella, la verdad. Agradezco enormemente que me lo recomendase, porque ha sido un viaje inolvidable. ¿Estáis list@s? Empecemos…
Sinopsis: En una posada en tierra de nadie, un hombre se dispone a relatar, por primera vez, la auténtica historia de su vida. Una historia que únicamente él conoce y que ha quedado diluida tras los rumores, las conjeturas y los cuentos de taberna que le han convertido en un personaje legendario a quien todos daban ya por muerto: Kvothe, músico, mendigo, ladrón, estudiante, mago, héroe y asesino. Ahora va a revelar la verdad sobre sí mismo. Y para ello debe empezar por el principio: su infancia en una troupe de artistas itinerantes, los años malviviendo como un ladronzuelo en las calles de una gran ciudad y su llegada a una universidad donde esperaba encontrar todas las respuestas que había estado buscando. «Viajé, amé, perdí, confié y me traicionaron.» «He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y he escrito canciones que hacen llorar a los bardos.» Me llamo Kvothe. Quizá hayas oído hablar de mí.»

Para el que se lo pregunte, el nombre que acabáis de leer se pronuncia «Cuouz», y es el protagonista de El Nombre del Viento, una novela del escritor Patrick Rothfuss publicada el 27 de marzo de 2007 (día de mi cumple, ¡Qué casualidad!). Pertenece a la serie Crónicas del Asesino de Reyes y continúa con su segundo libro, El Temor de un Hombre Sabio (2011). Se podría incluir dentro del subgénero narrativo de la novela fantástica, cuya historia se desarrolla en entornos irreales, imaginarios y donde la magia está muy presente. Su protagonista, Kvothe, es un joven que lo da todo por conseguir su cometido: ir a la Universidad. Se nos presenta como un héroe inocente, valiente y luchador y con él nos identificamos desde las primeras páginas del libro. Sus orígenes recaen en una troupe de músicos y actores con un final trágico, pues una noche son asaltados y asesinados por unos seres extraños. Esta troupe había sido formada por los padres de Kvothe, quienes serán asesinados también el mismo día. Nuestro protagonista es el único que consigue salvarse, y esta suerte que corre le llevará a convertirse en mendigo, ladrón, universitario, héroe y asesino.
La historia comienza en una posada, cuyo dueño, alguien llamado Kote, la regenta con la ayuda de su aprendiz, Bast. Tras una noche complicada en la que ha hecho acto de presencia un ser extraño que todos denominan demonio, un personaje llamado Cronista interrumpe la escena entrando en la posada. Allí, Cronista se percata rápidamente de quien es Kote y cuál es su historia, así que le pide que se la cuente para que él pueda escribirla y contarla. En un principio, Cronista le dice que con una noche será suficiente, pero Kote le dice que no, que tres noches como mínimo ya que su historia da para mucho y así, da comienzo la narración de la heroica historia de nuestro protagonista. Por lo tanto, en este primer libro de la saga asistimos a la infancia de Kvothe, la tragedia de la troupe que le lleva a mendigar por las calles de Tarbean, una gran ciudad perteneciente a la Mancomunidad con claras diferencias sociales, sus esfuerzos por conseguir llegar a la Universidad, su paso por allí y su lucha por conseguir averiguar quiénes son Los Chandrian (estos seres extraños, posiblemente responsables de la muerte de su troupe). A esta narración se le suma las explicaciones sobre todo lo relacionado con el mundo de la Universidad, los arcanistas y los profesores. Y cómo no, Kvothe es un chico joven con una sensibilidad increíble que consigue enamorarse y dar rienda suelta a sus sentimientos, contándolos desde la más pura delicadeza. A este maravilloso mundo de fantasía se le añade la importancia de la música desde la pasión que compartía Kvothe con sus padres y la troupe. Su laúd es su fiel amigo, lo único que le queda de esos maravillosos días y un recuerdo de su divertida y cariñosa infancia.
«Sí, soy un mito. Un mito muy especial que se crea a sí mismo. Las mejores mentiras sobre mí son las que yo mismo he contado.»
El ritmo de la novela puede resultar, en ciertos momentos, algo lento. Pero os aseguro que pronto vuelves a engancharte, pues siempre están sucediendo cosas que Kvothe tiene que resolver con su astucia y su inteligencia. Al final, se convierte en una novela entretenida, que sabe dejarte con ganas de más, de saber qué pasará con Kvothe, cómo logrará salir del nuevo problema o si conseguirá saber finalmente el nombre del viento… Todos los personajes están muy bien diseñados, desde el más simple e inocente Simon hasta el propio Elodin, maestro denominador que en un principio puede no parecer muy relevante en la trama, pero que sin duda lo llegará a ser. O la misteriosa Denna, uno de los personajes que más enganchan sin lugar a duda. Otro personaje interesante es el de Auri, una chica que vagabundea por las zonas subterráneas de la Universidad y a quien Kvothe le tiene un especial aprecio. A este personaje se le coge un cariño diferente, tanto es así que el propio escritor se dio cuenta y es por ello por lo que decidió escribir una novela corta dedicada exclusivamente a Auri. Se llama La música del silencio. Yo no he tenido oportunidad de leerla, aunque tengo muchas ganas, pero me han dicho que es bastante entretenida y se lee en poco tiempo. A continuación, os dejo la foto de su portada.

Con respecto a La Música del Silencio, es necesario mencionar el nombre de Nate Taylor como ilustrador de la novela. Este mismo artista ya ilustró otras obras de Patrick Rothfuss como Las aventuras de la princesa y el señor Fu: la cosa de debajo de la cama..



Quizás, un fallo que le encuentro a la novela es que, si bien es una gran novela de fantasía, algunos de sus capítulos se vuelven demasiado largos. Al estar contando la vida de Kvothe, hay cosas que, en mi opinión, se podrían haber ahorrado para conseguir una lectura más ligera. Por otra parte, a veces he llegado a pensar que se pierde demasiado en lo cotidiano, en asuntos que quizás no son tan relevantes para el/la lector/a pero que, sin duda, nos hacen conectar con Kvothe mucho más. Esta pérdida en elementos más anecdóticos hace que se le reste importancia a asuntos que realmente son interesantes desde mi punto de vista como lectora, como el por qué del nombre del viento o el asunto de Los Chandrian. Claro está que le siguen dos libros más, El Temor de un Hombre Sabio, ya publicado, y un tercero aún sin publicar y por el que la comunidad fan de la saga espera impaciente.
«¿Sabes de qué sirve perseguir a una criatura salvaje? De nada. Si persigues a una cierva, solo consigues asustarla. Lo único que puedes hacer es quedarte quieto donde estás, y confiar en que, con el tiempo, la cierva vaya hacia ti.»
En definitiva, una novela divertida y entretenida que os gustará. No os centréis solamente en esos pequeños fallos que yo le he encontrado, pues son una opinión muy personal y cada lectura es diferente, además de que debemos de tener en cuenta que todo libro tiene sus más y sus menos, y sin duda esta novela gana más que pierde. Es un libro que hay que leer, al menos para poder decir que has leído un Best Seller, y además uno de los más importantes de este siglo. No perdáis la oportunidad, lo tenéis en versión bolsillo (que sale un poco más barato pero, como siempre, advierto que la lectura puede resultar más pesada, pues la letra es más pequeña por el formato), o en versión normal. Es un libro largo, -me han comentado que El Temor de un Hombre Sabio lo es más-, sin embargo, puedes leerlo rápido y enamorarte de él.
«Su sonrisa podía parar el corazón de un hombre.»
Yo, por mi parte, me despido dejándoos esta recomendación. En cuanto me lea el segundo libro, volveré con más reseñas sobre esta maravillosa serie. También me gustaría comentaros que ahora mismo estoy leyendo Bala de Pájaros Cantores y Serpientes, y que en cuanto lo termine tendréis una reseña con mi opinión y su relación con Los Juegos del Hambre. ¡Un abrazo y portaros bien!